Cuando la evidencia se burla de la intuición, la perplejidad resulta inútil. Una y otra vez la esfera caerá a tiempo, igual que antes, igual que siempre; sin contradicción, sin Caos, sin otro destino alternativo que el de repetirse, tautológica.
Un día, dirán los narradores, que encontraron su imagen, aún tibia, custodiando a la Reina Hasechpsut en el Templo de Dei el Bari, y la bautizarán, otra vez: «la curva de la belleza».
5 comentarios:
Se puede ser crítico de verdad? Puedo manifestar lo que me pareció, así, crudamente?
Siempre fue tan sugerente y cuidadoso, esta vez, cambió su estilo...
Si tenemos en cuenta lo tautológico, ud repite la idea de diferentes maneras, antes, en la fémina que lo conducía por un laberinto sinuoso hacia una lugar escondido y ahora casi, casi, diría que la idea se repite, quizás agregó algo de prótesis, esa cola no es natural, no me embrome! Pero si hablamos tautrocrónicamente, ese agregado sufrirá la caída natural … Según sus anteriores publicaciones, era ud. distinto, más espiritual…M m m m
AnónimoA: Gracias por comentar.
Había pensado publicar esta foro de Leila Schneps http://www.math.jussieu.fr/~leila/Leila1.html donde se la ve revelando algún puzle de matemáticas puras pero, ya puesto a curvar el espacio sobre el pizarrón y a trazar puentes entre lo consumado y lo posible, pensé que no sería mala idea demostrar que también se puede curvar el espacio sobre el corazón y trazar puentes entre lo probable y lo imposible.
Jajajaja
Nuevamente me deslumbra! Es maravilloso! Qué cintura!!
Hace tiempo no sentía tanto amor por las matemáticas, y no se por qué, ahora me gusta más el coseno. Saludos
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